El Senado ha aprobado una moción del PP en la que solicita al Gobierno adoptar las medidas necesarias para incrementar los puntos públicos de recarga de vehículos eléctricos en el mundo rural, para eliminar la actual brecha entre las áreas rurales y urbanas. Durante el debate de la iniciativa, que ha contado con el voto en contra del PSOE, el senador popular y Alcalde de Calatayud, José Manuel Aranda, incide en que “no desarrollar la red de carga en todo el territorio condenaría al medio rural a seguir apostando por medios de transporte de motor térmico”.
Aranda reprochaba a la bancada socialista la falta de inversión de su Gobierno, por mejorar la movilidad de la España despoblada, a la vez que elogia el caso de Portugal, que gracias a medidas en materia de incentivos fiscales ha impulsado el número de puntos de recarga de vehículos eléctricos.
Así, el senador por Zaragoza recuerda que España debería tener instalados 45.000 puntos de recarga de acceso público y no los poco más de 25.000, muy por debajo de la media europea. En este contexto evidencia el retraso del despliegue de esta infraestructura en las zonas rurales. “Mientras que las áreas urbanas tienen casi 1.500 puntos más de carga nuevos, y las carreteras nacionales casi 700 en un año, en las zonas rurales hay apenas 34 más”, critica. A su parecer, “es imprescindible que los territorios con menor densidad de población no queden atrás y no desarrollar la red de carga en todo el territorio condenaría al medio rural a seguir apostando por medios de transporte contaminantes”
Igualmente, José Manuel Aranda explica que, según varios informes, una de las principales conclusiones es que el vehículo eléctrico continúa sin poder sustituir la operatividad y experiencia del usuario, respecto a los de motor térmico por falta de infraestructura de carga pública en los desplazamientos interurbanos. Por todo ello, el dirigente del PP propone incrementar la inversión del Ejecutivo para aumentar los actuales 314 puntos con cargadores de alta potencia en España.
“Si no se complementa el mercado con una fuerte inversión pública en territorios más despoblados, estas zonas quedarán atrás y la descarbonización del sector de transporte y la movilidad, así como su transformación, seguirán dos procesos distintos, uno rápido y uno lento, que incrementarán todavía más las desigualdades entre las dos Españas”, concluye.
