Beatriz García Lozano, graduada en Fisioterapia por la Universidad Pública de Navarra (UPNA), ha resultado ganadora de la III edición del concurso “Vivencias como estudiante de Enfermería y Fisioterapia”, que organiza el sindicato de enfermería SATSE para toda España en dos categorías: enfermería y fisioterapia.
Las personas participantes, estudiantes o egresadas de los mencionados grados sanitarios, debían explicar, a través de un relato, su visión sobre el futuro de la profesión desde un punto de vista personal, a través de las vivencias acumuladas en su periodo formativo. La bilbilitana lo hizo con el relato “FisioEsterapia”. La estudiante ganadora recibirá una tableta electrónica y un recopilatorio de exámenes oficiales. “He querido transmitir lo importante que es esta bonita profesión, y la necesidad de valorarla como se merece, para ello es importante visibilizar y reconocer las diferentes especialidades de esta profesión, tal y como llevan tiempo solicitando los fisioterapeutas. Ha resultado enriquecedor para mí tener a tan buenos profesionales durante mi formación académica, sin duda volvería a elegir el mismo camino de nuevo”, indica Beatriz García.
Incertidumbre y esperanza en tiempos de pandemia
En su relato, Beatriz García (Calatayud, 1995), explica cómo la fisioterapia va más allá de los masajes, puesto que incorpora el ejercicio terapéutico, la reeducación postural o el entrenamiento activo como herramientas para mejorar la condición física y evitar la aparición o reaparición de dolores: “la fisioterapia no es magia, es un trabajo constante en los que los resultados se ven cuando paciente y fisioterapeuta forman equipo”, indica la egresada.
Además, en su relato, explica las vivencias experimentadas durante el último año, que han sido, por un lado, incertidumbre y miedo y, por otro, esperanza y fuerza. También indica que, en esta época, ha quedado patente la importancia de la fisioterapia en los hospitales y cómo, gracias a los ejercicios y el movimiento, muchas personas han conseguido salvarse. Por último, Beatriz García apunta a la necesidad de formarse continuamente a lo largo de la vida profesional y a no perder nunca la ilusión por aprender.