PREGUNTA: Bueno, D. Jesús Vicente, su etapa como Arcipreste ha llegado a su fin. ¿Con qué se queda?
RESPUESTA: Esta pregunta es muy amplia, hay muchísimas cosas que me quedaría, pero, sobre todo, con las personas: Sacerdotes, laicos, cofrades, catequistas, movimientos, etc. En la última visita Pastoral que realizó D. Eusebio, antes de la pandemia a nuestro arciprestazgo, tuve la oportunidad de acompañarle a todos los pueblos y parroquias. Para mí fue una experiencia personal muy enriquecedora. Viendo nuestros pueblos, a veces, con muy pocos habitantes, pero con un corazón y una espiritualidad. Digna de resaltar.
P: ¿Cree usted que su trabajo y su día a día ha estado a la altura del Arciprestazgo de Calatayud?
R: Esta pregunta lo deben contestar los demás, y valorar mi trabajo. Yo veo que ha habido luces y sombras, por eso, es momento de agradecer a Dios lo bueno que ha habido y pedir perdón por los fallos y negligencias.
A mis espadas llevo más de veinticinco años de arcipreste, más de la mitad de mis años de sacerdote. Unos doce años aquí en Calatayud y trece en el arciprestazgo de Tarazona. Durante estos años, me ha tocado vivir situaciones bonitas y también otras dolorosas. Pero el éxito está en la “cercanía” con la gente, que puedan “contar” contigo, que puedan desaguarse de sus problemas y dificultades. Que te vean como un “buen amigo” de fiar y confiar.
P: ¿La reapertura de la Colegiata de Santa María puede haber sido uno de los más importantes logros en este tiempo? ¿Hay alguno más?
R: Sin duda, que la reapertura de la Colegiata de Santa María es uno de los más importantes logros de este tiempo. Hay que decir que ha sido un logro, porque han colaborado: muchas personas, instituciones, técnicos, gremios de distintos trabajos… que al final se ha conseguido una iglesia llena de luz, de belleza, y por supuesto, llena de Dios. Porque donde hay luz y belleza allí Dios invade todo.
Otro acontecimiento importante, siendo arcipreste, ha sido la creación de la Unidad de Pastoral para la ciudad de Calatayud. Es por donde debe ir la actividad pastoral, catequética y caritativa.
P: ¿Qué mensaje le envía a los sacerdotes del Arciprestazgo? ¿Y a los fieles de la zona?
R: A los sacerdotes y fieles les mando un mensaje de “unidad” de permaneced unidos a Cristo. Esta era una de las insistencias de Jesús en el evangelio. Dice Jesús: “Lo mismo que el sarmiento no da fruto, sino permanece unido a la vid, lo mismo vosotros si no permanecéis unido a mí”. Esta unidad entre sacerdotes y laicos también es muy importe. Estos dos últimos años, por grupos dentro de las parroquias, hemos estado trabajando sobre la “sinodalidad en la Iglesia” donde sacerdotes, laicos y religiosos vayamos trabajando juntos en nuestra misión eclesial.
P: Por último, ¿qué mensaje le envía al nuevo Arcipreste, D. Javier Sanz?
R: D. Javier, ya fue arcipreste en el Bajo Jalón cuando estaba de sacerdote en Brea de Aragón, por tanto, ya tiene experiencia, además, es joven. Tiene dos cualidades: Experiencia y juventud: fundamentales en nuestro tiempo. Le daría un consejo: que fuese un sacerdote cercano y que contase con todos los sacerdotes y laicos.
Por último, el mensaje que le enviaría, sería el mismo que le envié por WhatsApp cuando se hizo público su nombramiento: “Muchas felicidades por el nombramiento de Arcipreste. Cuenta conmigo para lo que necesites”.
