
Desde el pasado mes de mayo Calatayud cuenta con una planta de compostaje a la que se llevan los restos de basura orgánica que se generan en la ciudad, y que se vierten a los contenedores de color marrón distribuidos por distintas zonas. Para concienciar a la ciudadanía sobre los beneficios que tiene reciclar esa basura se ponía en marcha la campaña «Calatayud crece con la orgánica. ¡Apúntate al marrón y abona un futuro verde!”.
Dos alumnos del Grado de Ciencias Ambientales de la Universidad de Zaragoza se han sumado este verano a las acciones de información que lleva a cabo el departamento de Medio Ambiente del Ayuntamiento de Calatayud, para que los bilbilitanos se incorporen a ese sistema de recogida. Estos dos jóvenes explicaran a pie de calle, y en establecimientos que son grandes generadores de basura orgánica, como residencias, hoteles y restaurantes, cuáles son los beneficios que tiene la recogida de estos restos y cómo reciclarlos.
La concejal de Medio Ambiente, Ana Isabel García ha agradecido a todos los ciudadanos que ya participan en la reciclaje de la basura orgánica su compromiso. «Estamos en los inicios, y aunque todavía queda mucho camino, estamos seguros que con el tiempo podemos llegar a ser un referente de la gestión de este residuo en Aragón», afirma la edil. La gestión de los residuos de la ciudad «es un aspecto prioritario para el ayuntamiento», como demuestran las inversiones que se están realizando destinadas a la gestión y el tratamiento de biorresiduo procedente de la recogida separada domiciliaria y de grandes generadores.
Como explican Thais Benedí y Manuel Peñalosa, a esos contenedores se deben echar restos de verdura y frutas, carnes, pescado y cocinados, cáscaras de huevos, frutos secos, mariscos, pan seco, posos de café e infusiones, servilletas de papel y el papel de cocina sucio. También restos de poda y de jardinería. Todos estos residuos hay que depositarlos en bolsas compostables. De lo contrario se hace más perjuicio que beneficio dado que el plástico no se composta.
En Calatayud hay una treintena de contenedores con tape marrón a los que van estos residuos. En unos días se incorporarán otros 20. Se abren con una llave que, junto con un cubo y bolsas se les entrega gratuitamente en el ayuntamiento a aquellos particulares y empresas que lo soliciten.
A cambio los usuarios se comprometen a seguir las indicaciones para el correcto reciclado, porque verter otros residuos que no sean orgánicos complica todo el proceso posterior que termina con la elaboración del compost. Así es como un residuo se transforma en un recurso empleado como abono y nutriente para suelos, parques y jardines.
Los interesados en incorporarse a este sistema de recogida también pueden inscribirse en un formulario que puede descargarse desde aquí: https://docs.google.com/forms/d/1gB_oC0gbaathjT9Buqkp-nvWQUL3T0VXV7gDm-Pq_fs/edit
Con el reciclado de la basura orgánica se reduce la cantidad de residuos que se envían al vertedero. Eso supone un ahorro de costes además de un menor impacto ambiental.