Cientos de atecanos se han reunido hoy en la Ermita de San Lorenzo en el último día de sus fiestas. Tras el almuerzo, se han formado los tradicionales y muy queridos Castillos Humanos Andantes, formados por miembros de la Cofradía.
Tras realizar los castillos en la ermita, los atecanos han bajado a la Plaza del Cortijo donde realizan otro castillo: desde esa misma plaza hasta la Plaza de los Templarios, donde se ondea la bandera. Tras ello, queda el sorteo de los jamones y la degustación de sangría.
Sobre los Castillos Humanos Andantes
Se forma una torre humana de tres pisos. El primero lo forman seis de los jóvenes más fuertes; el segundo son otros tres jóvenes que, descalzos, se ponen de pie sobre los hombros de los primeros, y, finalmente, sobre todos ellos sube el más ágil que, en pie, lleva la bandera de la Cofradía. De esta guisa y acompañados por la charanga y el público asistente dan un giro alrededor de la ermita correspondiente.
Al regresar al pueblo de nuevo se erige el castillo humano que recorre algunas calles del pueblo nuevamente acompañados de la charanga y del numeroso público que se congrega para ver el espectáculo.
Este castillo de San Lorenzo se vuelve a erigir en la Plaza del Cortijo y se desplaza hasta la Plaza de los Templarios donde se hondea la bandera y se da por terminada la fiesta.