
El XXIII Autocross de Aguaviva, organizado por el Real Automóvil Club Circuito Guadalope, ha puesto un vibrante punto final a la temporada de autocross para los campeonatos de Aragón y Cataluña. La cita reunió a 27 pilotos en cuatro categorías (Turismos y Car Cross), ofreciendo un gran espectáculo a la afición.
El gran protagonista aragonés de la jornada fue el bilbilitano Javier Navarro, quien se alzó con la única victoria regional en la categoría más concurrida, la División II, reservada a los turismos de menor potencia. A los mandos de su Peugeot 205, Navarro demostró su habilidad y se impuso con un margen de tres segundos sobre el recién proclamado campeón de Aragón, Miguel Romero (Citroën Saxo VTS). El podio de la División II lo completó Ricardo Pellicer (Citroën Saxo VTS), quien además consiguió la victoria en la clasificación Junior.
En el resto de categorías, el dominio fue para los pilotos foráneos. Jesús Santillán (Mitusibishi Lancer Evo IX) dominó la División I de principio a fin, dejando a Óscar Escuder (Renault 5 Proto) en la segunda posición, a pesar de que este ya llegaba a Aguaviva con el título asegurado. La fémina Lucía Moratilla (Peugeot 207 Proto) firmó una meritoria remontada tras un trompo para asegurarse el tercer puesto.
La final de Car Cross fue un asunto de los hermanos Aranda, con Josep y Joan, ambos con Speedcar Wonder, logrando el primer y tercer puesto respectivamente. Bruno Cánovas (Casmat XC) se interpuso entre ellos. El subcampeón aragonés, José Ignacio Casino (Semog Bravo), fue el mejor clasificado de la región en esta categoría al finalizar cuarto. Por último, en la Junior Car Cross, el piloto de Masquefa, Oriol Cabeza (Speedcar Wonder), se llevó el triunfo, aunque la atención aragonesa se centró en Alan Kaminski (Speedcar Wonder), quien con su segunda posición amarró el título para la comunidad.








