La prueba más veterana de las que se realizan en Aragón, la Marcha Senderista Comunidad de Calatayud, cumplió su trigésimo quinta edición el pasado sábado 2 de marzo en la localidad de Ariza. La prueba era valedera para la Liga Ibérica de Senderismo de la FEDME y de la clásica del calendario de la Liga de Andadas Populares de Aragón de la Federación Aragonesa de Montañismo.
José Carlos Tirado, alcalde la localidad anfitriona, dio el banderazo de salida acompañado de Antonio Mingotes, Presidente de Comuneros; Ángel Lassa, Director del evento deportivo y miembro de la territorial Aragonesa; y Antonio Turmo, responsable de senderismo de la Federación Española. También acudía el presidente de la Comarca Comunidad de Calatayud, Ignacio Marcuello.
La sección de montañismo del Club Comarcal Comuneros Calatayud que comenzó a organizar esta actividad deportiva en 1990, la ha convertido en una pionera demostración de que las sinergias entre deporte, cultura, naturaleza, tradición y turismo también funcionan. Los balnearios y casas rurales de la comarca acogieron a participantes llegados de las regiones de Madrid, Castilla La Mancha, La Rioja, Castilla y León, Andalucía y de la mayoría de las 33 comarcas aragonesas. Entre ellos se encontraban dos campeones de la temporada pasada del ranking de la Liga Española de Senderismo: Joaquín Bordonaba de Zaragoza y Toñi Sesma de Logroño.
Socios y amigos de Comuneros, el ayuntamiento de Ariza, la Asociación local La Legua y multitud de voluntarios se volcaron en la organización y coordinación de la prueba, situándose en avituallamientos y distintos puntos del recorrido para hacer más llevadero el evento deportivo en el que el viento hizo acto de presencia.
Los senderistas y corredores disfrutaron de dos recorridos que partieron desde el Pabellón Polideportivo para recorrer rutas de 21 y 10 km por su término municipal, principalmente por el SL-67, descubriendo el “Art Brut” ubicado en el Castillo del Sacristán. Al regresar pudieron visitar la Iglesia de Ariza y su casco antiguo. La anécdota de la jornada la propició el montañero andaluz Luis Hernández del club Andarax en las Alpujarras que vino desde Almería para participar en la andada más longeva de Aragón.