Fue el 10 de marzo de 1.981 cuando el ayuntamiento de Gáldar trasladaba al de Calatayud, gobernado por el aragonesista D. José Galindo Antón la propuesta de hermanarse. Lo hacía con motivo de los 500 años que entonces se cumplían del encuentro del último rey de Gáldar, Tenesor Semidán ante los Reyes Católicos en Calatayud. A partir de ese momento Semidán pasaría a llamarse Fernando Guanarteme.
Por acuerdo plenario y unánime de la Corporación municipal bilbilitana se aprobó ese hermanamiento y las dos ciudades constituyeron sendas comisiones para preparar los actos con los que esa unión se iba a formalizar.
El primero de los dos encuentros tuvo lugar en Calatayud ese mismo año en el marco de las fiestas de San Íñigo Abad, patrón de la ciudad bilbilitana. En ese mes de julio, y durante las celebraciones por Santiago, patrón de Gáldar, la delegación bilbilitana suscribió ese compromiso en la ciudad grancanaria.
A lo largo de estas cuatro décadas ha habido algunas visitas de representantes de las dos ciudades y en 2019 el contacto entre los regidores de los dos municipios se retomó. Fue con motivo de unos incendios forestales en Gran Canaria que obligaron a desalojar a vecinos de varios núcleos de población, entre ellos Gáldar.
El primer edil bilbilitano, José Manuel Aranda, contacto con su homólogo para interesarse por la situación y ofrecer la ayuda que se pudiera necesitar. Esos hechos llevaron a los dos ayuntamientos a impulsar la confraternización, y a expresar esa voluntad de forma oficial. Así se puso de manifiesto en julio de 2021. Entonces el alcalde y concejales de Calatayud viajaron a Gáldar invitados a diferentes actividades culturales que culminaron con el Acto Institucional de Hermanamiento que ahora se repite en la capital bilbilitana.
