Los usuarios de la Residencia Municipal San Íñigo ya pueden utilizar el nuevo ascensor montacamillas del centro. El Ayuntamiento ha invertido 31.814 euros en cambiar la maquinaria, que databa del año 1994 y se encontraba obsoleta.
El nuevo ascensor incorpora mejoras tecnológicas para facilitar la movilidad de los usuarios, como la instalación de una barrera fotocélula amplia para evitar obstrucciones en la entrada, un variador de frecuencia que garantiza la micronivelación de la cabina con las plantas , adaptación braille y auditiva y un botón de accionamiento para bomberos, que prevendrá su uso en situaciones de emergencia.
La empresa ThyssenKrupp Elevator ha realizado el suministro, el montaje de la maquinaria y se ocupará del servicio de mantenimiento durante dos años. La máquina y el motor se han fabricado en Italia con una tecnología novedosa.
La Residencia Municipal San Íñigo cuenta con tres ascensores, uno de ellos camillero y un elevador de uso exclusivo para la cocina. El alcalde ha informado que en 2022 se renovará otro ascensor con capacidad para ocho personas.