La Residencia Municipal de Mayores “San Íñigo” de Calatayud ha empezado a realizar nuevos talleres de estimulación cognitiva con residentes que padecen demencia en distinto grado. Estas personas que sufren un deterioro cognitivo participaban en talleres de escritura, lectura y otro tipo de ejercicios de mesa para mantener y mejorar la memoria, la atención y el lenguaje.
Desde hace algunos días el centro dispone de un equipo de pantalla, con proyector y materiales audiovisuales, y que como explica la terapeuta ocupacional del centro, Blanca Remacha, ha permitido reforzar esta atención y la estimulación, “a nivel cognitivo, visualmente, y a través de la música”. En este tipo de demencias la memoria musical es la última que se pierde y se está trabajando con otras funciones en las que antes no se podía.
Los grupos de esta terapia son reducidos, de entre siete y ocho personas. “Así es como mejor se trabaja – dice Remacha- y estas se agrupan en función del grado de demencia”, que va desde muy avanzada donde el lenguaje ya está muy perturbado, a moderada y más leve.
La concejal delegada del área del Mayor en el Ayuntamiento bilbilitano, Simona Dragan, ponía el acento en que estas actividades contribuyen al bienestar de los mayores y a la conservación de funciones, cuando el organismo sufre cambios internos y externos debido a la edad y a otras enfermedades. Estos talleres se desarrollan en la segunda planta de la residencia y vienen a mejorar la atención en este equipamiento municipal, en el que de forma continuada se vienen haciendo inversiones.