Los juegos infantiles de Calatayud continuarán cerrados en un ejercicio de responsabilidad para evitar contagios. Estos juegos se consideran un factor de riesgo y espacios de alta propagación para la transmisión de la enfermedad ya que resulta muy difícil evitar el contacto de los menores con las superficies y no es posible realizar una desinfección completa después del uso de cada usuario.
El Ayuntamiento decidió precintar los juegos infantiles de la ciudad durante el verano, ante el incremento de casos en la Comunidad Autónoma, como una medida de protección para el público infantil. Se permite, sin embargo, el paseo y la práctica de deportes en las zonas verdes. En la misma línea se encuentran los centros educativos, donde el Departamento de Educación del Gobierno de Aragón ha decidido precintar juegos infantiles y promover los deportes y juegos individuales.
El comienzo del curso educativo ha puesto en evidencia la facilidad de contagios entre los niños, con los que es complicado mantener las medidas de protección y distancia social. En estos primeros días ya ha sido obligado el cierre de varias aulas en Aragón por este motivo.
«Mantener los parques cerrados es un ejercicio de responsabilidad que debemos seguir aplicando. Somos conscientes de que requiere un esfuerzo para todos, especialmente para los más pequeños y lamentamos que esta medida les afecte tanto, pero consideramos que es necesaria», recuerda el alcalde, José Manuel Aranda.
Calatayud es una de las zonas de Aragón con menos casos de COVID y este es el resultado del esfuerzo colectivo de toda la población. Las medidas que se han aplicado y el cumplimiento de la normativa ha hecho que hasta la fecha la incidencia haya sido baja en la zona.