
La Plaza de San Andrés estará en obras a partir del lunes. El Ayuntamiento inicia el proyecto de renovación de esta plaza con el fin de mejorarla, renovar las infraestructuras y poner en valor la iglesia y su torre como joya del patrimonio mudéjar. Redactado por el arquitecto Sergio Sebastián, la obra supone una inversión total de 325.899 euros, de los cuales la DPZ aporta 150.998 euros.
El concejal de Urbanismo junto a la empresa Aquara, adjudicataria de la obra, han mantenido un encuentro con los vecinos de la plaza, de la cuesta de Santa Ana y su entorno para explicar el transcurso de las obras y las previsibles incidencias.
El proyecto plantea la eliminación de barreras arquitectónicas de la plaza con una construcción de plataforma única. De esta manera se generan distintas pendientes que permiten la correcta evacuación y recogida de obras. Para ello se ha estudiado la disposición y el sistema de rejillas y canales con su conexión con la red de alcantarillado.
Se generará una mayor superficie de espacio público eliminando las plazas de aparcamiento, con el fin de dar mayor visibilidad al conjunto histórico artístico. El pavimento incorporará piezas cerámicas de un material antideslizante que extenderá la geometría de la propia torre.
El Ayuntamiento pretende poner fin a las numerosas irregularidades que presenta esta plaza: grietas, hundimientos y diferencias de nivel, que supone un riesgo para los usuarios. El actual hormigón impreso ha agotado su vida útil tras varias reparaciones, así como las aceras, que han recibido mejoras puntuales durante los últimos años.


Afecciones al tráfico
La obra generará algunas afecciones al tráfico que se revisarán de manera semanal para facilitar, en la medida de lo posible, el tránsito de vehículos. Durante las dos primeras semanas de trabajos, los vehículos no podrán acceder a la Calle Cuesta de Santa Ana pero el tránsito por la plaza estará asegurado. Tras estos primeros trabajos se reabrirá el acceso a vehículos a la Cuesta Santa Ana desde la Calle Hospital y se cerrará el tránsito por la plaza.
La Rúa de Dato se convertirá en doble dirección desde Vicente de la Fuente hasta el cruce con Calle Hospital, para ello, se regulará el tráfico con semáforos. Para acceder a la Plaza de Santa María los vehículos deberán tomar la Calle Vicente de la Fuente.
Por otro lado, la Calle Amparados cambiará de dirección desde la Plaza de Santa María y se podrá estacionar en la plaza mientras duren las obras. El paso de peatones está garantizado en todo momento, así como el acceso al Teatro Capitol, que continuará con su programación habitual, y a la Iglesia de San Andrés.
Con el fin de reducir el impacto en el tráfico, el Ayuntamiento de Calatayud ha programado estas obras durante el verano, periodo de menor movilidad. A pesar de ello, la obra afecta a una zona del casco histórico donde existe una mayor complejidad a la hora de establecer rutas alternativas. Se ruega a toda la ciudadanía que extreme la precaución durante las próximas semanas en esta zona y atienda la señalización instalada.

