Los trabajadores de la Residencia Municipal San Iñigo se someten a partir de hoy a pruebas de antígenos, como medida preventiva ante los brotes que están afectando a otras residencias de la comunidad autónoma. Así lo anunció este lunes el alcalde de la ciudad, que ha mantenido esta mañana una reunión con los empleados del centro.
Los test de antígenos han sido adquiridos por el Ayuntamiento de Calatayud y será el personal de enfermería de la residencia quien los realice. «Planteamos realizar despistaje cada dos semanas aproximadamente, con el fin de adelantarnos a posibles brotes», explica Aranda, que esta tarde mantendrá una reunión con los familiares de los residentes para explicarles las medidas tomadas por el Ayuntamiento.
Asimismo se solicitará a los familiares que, durante esta sexta ola de la pandemia en Aragón reduzcan en la medida de lo posible las visitas y extremen la precaución cuando las lleven a cabo.