
El director del proyecto de reparación que se lleva a cabo en la ermita de Consolación, antigua Sinagoga Mayor de Calatayud ha explicado el avance de las obras en una visita con el alcalde y el concejal de Urbanismo, Patrimonio y Vivienda del Ayuntamiento de Calatayud.
Los arquitectos Fernando Alegre, junto Daniel Orte Ruiz, y Cristina Blas, gerente de Construcciones Blas Montañés, han mostrado los sistemas de cosido y sujeción que están aplicando tanto en la bóveda como al muro actual de la cabeza de este edificio que precisaba de una reparación urgente. Se están estabilizando los movimientos que se venían produciendo por empujes mal compensados en las bóvedas y cubiertas y que estaban generando grietas en el centro de la nave.
José Manuel Aranda, el primer edil, y José Manuel Gimeno, responsable de Urbanismo y Patrimonio en el Consistorio Bilbilitano, se han interesado por las posibilidades de aprovechar esta intervención para obtener más información sobre las estructuras y origen de lo que fue la Sinagoga Mayor, y hacerlo por medio de técnicas de prospección sencillas y nada invasivas.
Se tiene la sospecha de que las estructuras de este inmueble dedicado al culto de los judíos y que posteriormente paso a ser espacio cristianizado, se puedan encontrar no a una gran profundidad. “Nos gustaría poder abrir una nueva línea de investigación sobre las características de esta sinagoga, dimensiones y distribución de espacios para profundizar en el pasado de nuestra judería que fue una de las más importantes del Reino de Aragón después de la de Zaragoza”, indicaba Aranda.

Una vez consolidado este espacio en el que ya se actúo en el año 1.995, y según comentaba José Manuel Gimeno, este edificio volverá a abrirse como ermita del Barrio de Consolación, recuperándose también el campanico que dejó de sonar hace años. Según explicaba el edil, se tratará también de acercar a la ciudadanía y visitantes a su interior en diferentes ocasiones y con una oferta cultural acorde al lugar.
Esta iniciativa forma parte de la apuesta clara del Ayuntamiento de Calatayud por su Judería. En la administración local se confía en que pueda incluirse en la Red de Juderías de España – Camino de Sefarad. Se quiere dar a conocer ese pasado, el angosto trazado urbano del barrio judío bilbilitano, el legado sefardí que conservamos, y las historias de vida de quienes habitaron entre el Castillo de Doña Martina, la plaza de San Andrés y la Cuesta de Santa Ana.