El departamento de Comercio del Ayuntamiento de Calatayud ha actuado en varios locales comerciales del primer tramo de la Rúa de Dato. Se han instalado vinilos que recuerdan a comercios tradicionales y que han sido creados por la diseñadora bilbilitana Adriana Martín Polo.
La intervención ha beneficiado a siete locales con diferente número de escaparates cada uno de ellos y de diferentes tamaños. Con el acuerdo de los propietarios y con la financiación de fondos europeos se ha llevado a cabo esta intervención artística también en las sobrefachadas y en cerramientos exteriores.
Las creatividades según explicaba Adriana, están inspiradas “en los antiguos comercios que tenían una estética muy cuidada y muy llamativa, con artesonados de madera tallados y colores muy vistosos. Queríamos recrearlos para trasmitir el potencial que tienen estos locales”, afirma. En cada uno de ellos se ha integrado el contacto por si existe interés por ese espacio.
Diferentes acciones de apoyo al comercio
Entre octubre de 2021 y febrero de 2022 se desarrolló el Plan de Acción para la Mejora de la Competitividad comercial que incluía 10 líneas estratégicas y varias acciones para cada una de ellas. Como explica la concejal de Comercio, Mar López, “uno de esos ejes planteaba intervenir en el entorno físico, en el urbanismo comercial, por ser un aspecto clave que influye en clientes y comerciantes”, según se detectó en encuestas realizadas entre los dos colectivos.
El cambio de hábitos en la distribución comercial y la fuga de compras y consumo, ha llevado de forma generalizada en los centros de las ciudades al cierre de negocios y a la existencia de locales vacios.
La Rúa de Dato, que tradicionalmente ha sido una calle muy comercial, es una de las principales zonas de Calatayud en las que se ha detectado una “ruptura de la continuidad comercial”, es decir, que existen más de dos locales vacios de manera sucesiva. Como esta vía, también la Plaza San Francisco eran zonas prioritarias.
El abandono de algunos de estos locales y la falta de adecuación provocan un impacto negativo y afectan a la compra en el resto de los negocios de esas zonas.
Para contribuir a la atractividad comercial y mejorar la estética y la experiencia de compra, el Ayuntamiento de Calatayud proponía a los propietarios de estos locales cambiar su aspecto con esta iniciativa.
Es una acción incluida en la línea de Ayudas para Mercados Sostenibles y Canales Cortos de Comercialización, y en el Plan de Recuperación, Transformación y Resiliencia, y está financiada por la UE y los fondos Generation NEXT.
El Ayuntamiento de Calatayud concurrió a estas ayudas y fue el único adjudicatario de las mismas en la provincia de Zaragoza. Esta medida se suma a otras que se vienen impulsando como la creación de un Centro Comercial Virtual “Calatayud Ven”, para fomentar las visitas y las ventas, y para crear nuevas herramientas que ayuden al sector comercial a ser más competitivo.