
Las piscinas de Torres y Embid de la Ribera, barrios pedáneos de Calatayud, se han abierto este verano después de la realización de diferentes reformas no sólo estéticas.
Estas son unas instalaciones que los alcaldes pedáneos entienden fundamentales porque son espacios donde refrescarse y socializar, pero es que además hacen más atractiva la estancia para los descendientes, los hijos y nietos que acuden en fines de semana y vacaciones.
De las mejoras en la piscina de Torres se encargaba la empresa DRM y en Embid ha trabajado Primos Bílbilis. En total la inversión ha superado los 107.000 euros.
Las inversiones se han hecho en la sustitución de canales perimetrales, los sistemas de los vasos se han cambiado, las instalaciones de las duchas, las del riego, además de vallados y pavimentosc entre otras mejoras.
El próximo año, la concejalía de Barrios, y la de Urbanismo del Ayuntamiento de Calatayud, acometerá las mejoras en las piscinas de Huérmeda y las de San Antonio.