
La Lotería de Navidad vuelve a reafirmar su compromiso con la divulgación cultural al convertir, un año más, su tradicional décimo en un pequeño lienzo de gran valor artístico. Gracias a la colaboración continua entre Loterías y el Museo Nacional del Prado, la «capilla» del boleto se transforma en una herramienta de difusión masiva que rinde homenaje al patrimonio pictórico español.
Para el sorteo de este año, la obra seleccionada es «La Natividad de la Virgen», una pieza clave del pintor madrileño Juan García de Miranda (1677-1749). Este óleo sobre lienzo, perteneciente a las colecciones del Prado y depositado actualmente en el Museo de Salamanca, captura con maestría el nacimiento de la Virgen María a través de una composición dinámica y cargada de simbolismo.
La escena destaca por un uso magistral de la luz y el color. En el primer plano, la recién nacida aparece custodiada por dos figuras femeninas y un ángel, mientras que al fondo se observa a Santa Ana en el lecho junto a su esposo, San Joaquín. La mirada del espectador es guiada de forma natural hacia la madre de Jesús gracias a un intenso claroscuro y a la fuerza de las tonalidades rojas presentes en el dosel y las vestiduras, que dotan al conjunto de una atmósfera sobrenatural y solemne.
La elección de García de Miranda también pone en valor la figura de un artista excepcional que superó grandes retos físicos; manco de nacimiento, desarrolló toda su carrera pintando exclusivamente con la mano izquierda. Su talento le permitió acceder a las colecciones reales, donde se nutrió del estilo de genios como Velázquez o Rubens. Su prestigio fue tal que, tras el devastador incendio del Real Alcázar de Madrid en 1734, fue nombrado restaurador oficial de los lienzos rescatados y, posteriormente, pintor de cámara de la monarquía. Con esta iniciativa, millones de hogares españoles portarán este diciembre no solo la ilusión del premio, sino también un fragmento de la historia del arte barroco.








