
Las obras y trabajos que se han llevado a cabo para sustituir infraestructuras, pavimentos, mobiliario y para mejorar la movilidad las calles San Antón, travesía de San Antón, Serón, Buenaire y Reconciliación ya han concluido.
Ha sido una intervención de gran envergadura que se ha desarrollado en tres fases y que ha cambiado el aspecto de estas vías que se encuentran entre la calle Luis Guedea, laRúa de Dato y la plaza Joaquín Costa.
La inversión ha alcanzado los 346.000 euros y ha venido a homogeneizar la estética de todo este entorno con otras zonas del casco histórico en las que se ha ido actuando.
La estrechez de las aceras, la existencia de socavones y la dificultad que existía para el tránsito de peatones y de vehículos se ha corregido. Un punto en el que esa transformación es evidente es la calle Buenaire, dotándose a la vía pública de unos metros en un tramo muy estrecho lo que facilita la circulación gracias al acuerdo con la propiedad de una parcela.
Ha sido la empresa bilbilitana DRM la adjudicataria y encargada de sustituir infraestructuras y pavimentos, renovar aceras y calzadas creando una plataforma única en la que se diferencia la superficie para peatones y vehículos. Se han instalado nuevas farolas, jardineras y otro mobiliario urbano, así como cubre-contenedores con una vista general de la ciudad. También se han mejorado los accesos a los portales de viviendas, comercios y garajes.
Desde el departamento de Urbanismo del Ayuntamiento bilbilitano se planifican anualmente reformas de distintas zonas del casco antiguo, como las que también han cambiado este año la plazuela del Santo Sepulcro, el espacio entre el Rincón de Gotor y la calle Ruzola, o la plaza del Santuario de la Peña.









