
Este próximo sábado 4 de octubre el Aula Cultural “San Benito” de Calatayud abrirá sus puertas desde las 11h para acoger la Jornada de Puesta en Valor de las Tradiciones Musicales Aragonesas. Será una cita que pondrá en valor instrumentos que son pura artesanía, composiciones y partituras, que se conservan o se han recuperado a través de la tradición oral.
Es una iniciativa conjunta del departamento de Cultura del Ayuntamiento de Calatayud junto con los Dulzaineros del Corral Blanco. Este joven grupo de música tradicional cumple este 2025 cinco años, en los que ha alcanzado algunos de los objetivos que se habían fijado, y han ido marcando otros que han surgido conforme se han dado a conocer en la comarca y fuera de ella.
David Gálvez señalaba en la presentación de esta jornada que se mostrará parte del vasto conjunto tanto material como inmaterial, que conforman instrumentos, canciones, bailes y otras expresiones. En definitiva todo lo que se compartió de generación en generación y que ha llegado hasta nuestro díascon un alto riesgo de perderse”. En la actividad de este conjunto bilbilitano además de la animación musical tradicional está la recuperación y promoción de la música aragonesa.
Durante la mañana y la tarde del sábado se podrá visitar una gran exposición en la que se han reunido un centenar de instrumentos artesanales y de todo el mundo. El aula abrirá de 11.00 a 13.00 y de 17.00 a 21.00 horas. Habrá también música a las 12.00 y por la tarde, a las 18.00 un taller en el que se mostrará la creación de instrumentos con ala de buitre. Estará impartido por Fran López Otín. Gálvez añadía que López Otín teatralizará un cuento con los daños que sufren estas aves al colisionar con los aerogeneradores.
A las 20.00 en este espacio cultural municipal sonará la música con Pablo Morales y Chaime Magallón, integrantes del grupo Lurte. “Será un concierto didáctico que recorrerá lo más profundo de las raíces de nuestra música”, comentaba David Gálvez.
“Deseamos que esta jornada sea motivo de orgullo, curiosidad y compromiso”, añadía este integrante de los Dulzaineros del Corral Blanco, en el que se unen una decena de personas con mucha ilusión y que hacen un loable esfuerzo para que no se pierdan bailes como los de los villanos que tuvieron muchos pueblos, y dances como el de Torrehermosa, que a partir de lo que les contaron los mayores han pasado a una partitura para que pueda perpetuarse.

