En el calendario de competiciones de Mountain Bike, la Far West Race de Calatayud está reconocida por los expertos y deportistas como una de las diez más destacadas del país.
Esta carrera, a pesar de ser una de las más jóvenes y recientes, es de las que ha alcanzado más proyección y prestigio, tanto por los entornos naturales por los que discurre el circuito, como por la excelente organización y el cuidado de los detalles para la atención de los participantes, jurados y patrocinadores.
En estas semanas se están revisando los trayectos de las dos etapas de 75 y 58 kilómetros con desniveles de hasta 1.600 metros acumulados.
Héctor Sarriá, concejal de Deportes elogiaba “la pasión y profesionalidad” de los miembros de INCA, la asociación de clubes que han conseguido introducir la Far West entre las más valoradas de España por los “bikers”. Los fines, indicaba el edil, ya se están viendo deportistas que vienen a probarse en el recorrido de una competición con la que colabora el Ayuntamiento de Calatayud tanto económicamente, como en la logística. “Será mucho más que una carrera de BTT, se convierte en espectáculo y en una gran promoción turística que también cuenta con el apoyo del Gobierno de Aragón”, indica Sarriá.
Este tipo de eventos se quieren impulsar desde la DGA con un plan estratégico que unirá turismo y deporte. La Far West por la sierra de Armantes es un gran ejemplo de esas sinergias y del impacto que este tipo de pruebas tienen en territorios de Aragón, con patrimonio natural y que desestacionalizan la ocupación hotelera.
